Perro va al veterinario y piensa que está ahí por abrazos.


Kayleen Campbell enfrenta muchos días difíciles como técnica veterinaria certificada en un hospital de urgencias para animales. Pero ella se asegura de encontrar la alegría donde pueda, generalmente en las travesuras dulces y divertidas de sus pacientes.

La mayoría de los perros y gatos que cuida se encuentran en un estado vulnerable, pero eso no significa que sean menos exigentes de atención y amor. Esto fue especialmente evidente cuando se llamó a Campbell para ayudar con una extracción de sangre durante un día agitado.

"Tenemos que sujetar la vena yugular después de extraer sangre, pero esta dulce niña pensó que estaba allí solo para los abrazos", escribió Campbell en Reddit. "Es por eso que amo mi trabajo".

Kayleen Campbell

Como explicó Campbell, el cuello es un sitio preferido, ya que permite que los veterinarios extraigan sangre rápidamente sin sacrificar las venas de las patas delanteras, que pueden ser necesarias para los catéteres intravenosos. Sin embargo, el cachorro, que tenía entre 12 y 13 años, no entendía muy bien por qué Campbell la estaba abrazando tan cerca, y tampoco parecía importarle a ella.

Kayleen Campbell

"Retener la vena por lo general solo toma un corto período de tiempo, pero esta dulce niña se recostó en mí y pensó que solo estaba allí para brindarle amor y atención, algo que me alegró dar", dijo Campbell. "No diría que esta es una reacción común principalmente porque muchos perros no quieren quedarse quietos por un período prolongado de tiempo en un lugar donde están pasando tantas cosas".

El perro que buscaba la atención distrajo a Campbell el tiempo suficiente para que su compañero de trabajo tomara en secreto algunas fotos de la dulce interacción. Pero este "abrazo" no fue de ninguna manera un incidente aislado. Campbell y sus colegas siempre están felices de acurrucarse con cualquier animal que lo necesite.

Kayleen Campbell

"Por supuesto, algunos están nerviosos o asustados, en cuyo caso trato de ser lo más respetuoso posible con sus necesidades", dijo Campbell. "Pero cuando veo perros amistosos, felices o gatos ronroneando, siempre hago tiempo para prestarles atención y amor".

Kayleen Campbell

Aunque poder acariciar todos los dulces animales que podría desear es genial, la mejor parte del trabajo de Campbell es ayudar a sus pacientes a sentirse mejor. "Me encanta ser parte del proceso de diagnóstico para averiguar qué está pasando con una mascota enferma", dijo Campbell. "Para que luego pueda ser parte del proceso de tratamiento para ponerlos en el camino de la recuperación".

Kayleen Campbell

Y a pesar de que sus días se pasan rodeados de animales, el placer de conocer a cada nuevo paciente aún no ha desaparecido. Campbell agregó: "Todavía me emociono irracionalmente cuando veo un gatito".

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